miércoles, 1 de abril de 2020

Científicos por un día

Experimentos científicos en casa


Los experimentos y los juegos científicos son actividades emocionantes, que captan la atención de grandes y pequeños. La ciencia y los mecanismos que regulan la naturaleza y el mundo se pueden aprender fácilmente gracias a ellos. Resultan herramientas perfectas para entender la realidad.

A través de los experimentos, los niños son actores del proceso de aprendizaje: desarrollan hipótesis, identifican consecuencias, solicitan información adicional y comprenden los mecanismos que gobiernan la realidad.

Los beneficios son muchos: por un lado, se demuestra que gracias a los experimentos, los niños desarrollan más la curiosidad por todo lo que les resulta desconocido, y se aproximan a los problemas con más entusiasmo. Además, el proceso de aprendizaje es activo: en lugar de incorporar de forma pasiva la información y el conocimiento, se hace de forma activa, con más atención, participando, escuchando las ideas de los demás y aplicando el trabajo en equipo. 
Al mismo tiempo, se aprende la importancia de respetar diferentes opiniones y de reflexionar para llegar a conclusiones correctas.
El factor sorpresa al final de un experimento también es ideal para captar la atención de los niños, especialmente de aquellos con edades comprendidas entre los 6 y los 12 años. Aprender a aprender no es un juego de palabras, es el verdadero objetivo de la ciencia. Los niños son, por naturaleza, pequeños científicos, receptores perfectos de información, y una gran fuente de curiosidad por descubrir aquello que les rodea. La ciencia en edades tempranas ayuda a desarrollar correctamente el pensamiento crítico, a observar y a razonar.

Os dejo un enlace donde encontraréis 15 experimentos científicos super divertidos para realizar en familia.